OLIMPO, EN LA PREVIA DE UNA NUEVA AVENTURA
Iván Furios parece ser uno de los refuerzos más firmes. |
Según ha revelado el sitio
aurinegro.com.ar, el que mejor sigue el desenvolvimiento de la etapa preliminar
al debut de Olimpo en la Primera B
Nacional (campeonato 2012/2013), son 20 los refuerzos que se han incorporado al
plantel.
Esta es la nómina:
Arqueros: Nereo Champagne
y Darío Capogrosso.
Defensores: Emanuel
Martínez, Iván Furios, Néstor Moiraghi, Matías Villavicencio, Ángel Alonso,
Rodrigo Canosa y Gonzalo García.
Mediocampistas: Marcelo
Vega, Adrián Martínez, Jonathan Blanco, Leonardo Gil, Diego Romero, Fernando
Gutiérrez y Matías Soto Torres.
Delanteros: Nahuel
Benítez, Pablo Miranda, Marcos Riquelme y Maximiliano Brito.
Ya como expresión propia, a y
pocas horas más de dos días del debut ante Ferrocarril Oeste (lunes 13 a las 16.30), es bueno
reflexionar repitiendo algo nuestro que no es nuevo: el aurinegro ha descabezado
su equipo anterior y, fiel a una tradición que se prolonga, ha hecho ingresar a
una veintena de jugadores.
Es decir, como cada nuevo técnico
que viene con su librito bajo el brazo, Walter Perazzo, traído para intentar
salvar la categoría (malo) o para emprender después la búsqueda de un ascenso (esto
puede ser bueno), descalificó al barrer a quines hicieron la pobre campaña en la Primera A de AFA.
En la búsqueda de rearmar un
plantel (que sólo conseguirá amalgamar debidamente cuando haya pasado, con mucha
suerte, la primera rueda casi de la competencia) se trajo todo tipo de
jugadores: defensores, carrileros y “medias” punta.
En la etapa previa, Olimpo
demostró su falencia frente a los marcos rivales: careció, como desde tiempo
que se remontan a la presencia del artillero Ismael Blanco, el “Zungui”, de
alguien que la meta. El periodismo obsecuente se “deslumbró” por algún tanto
frente a un elenco del torneo liguista, como si eso fuera positivo.
Con esa precariedad en zona de
definiciones, que hace añorar aquella dupla “Ca-Ca” que integraban Silvio
Carrario y Cristian Castillo, un “histórico” de la divisional de ascenso emprenderá
la aventura, nada fácil, de procurar su retorno a la elite del fútbol argentino.
Una vez más, todo se ha hecho
a medias. La dirigencia ha mostrado su falta de audacia. Y de los timoratos, no
hay historia.
Comentarios