AGÓNICO PERO VALIOSO EMPATE DE OLIMPO PARA SEGUIR INVICTO

Fue 3 a 3, ante Godoy Cruz Antonio Tomba, en vibrante final.

El fútbol tiene ese “no se qué” que lo convierte en un espectáculo maravilloso; casi incomparable, según sean sus protagonistas.

El colorido, en una tarde como la de este viernes (25), es seguramente algo aparte. Porque es un verdadero placer acercarse, como ocurrió, al Carminatti. Viendo casi siempre las mismas caras.

Esta vez, en el sector de “cacheo”, en el que nos derivan, por una simple cuestión de años a cuestas, la cosa fue rápida. Raramente sucede así. Pero, lo fue. Ya ingresados, superando el vallado de los “barra”, con bombos, banderas y gritos (todo a la vez), apreciar, desde lo alto de la tribuna que da espaldas a Angel Brunel, en el mismo lugar que ocupamos desde hace una pila de años, el verde césped del campo de juego, fue otra invitación al regocijo.

Allí, en ese sitio del esquinero, más caras conocidas. Las de siempre. Y a esperar. Con las mangas estiradas, apareció el equipo, con los jugadores llevando a sus chiquitos de la mano (y alguno en brazos), en una imagen que es propia del fútbol de estos tiempos, que tiene mucho de malo, pero también de bueno, como eso. Y porque, también hay que decirlo, ahora es algo para la familia, sobre todo aquí, donde asistir y disfrutar es una misma cosa. Por eso, algunas veces, vamos con Renata a la cancha, porque desde muy chiquita, ha lucido ya los más lindos colores del fútbol: el oro y el negro.

Pitazo inicial (cuando la TV lo quiere, claro). Y la “nueva estática”, haciéndose notar. Si estaba antes, no le habíamos prestado atención. La de “ahora”, al menos para nosotros, da gusto. ¿Es del “fútbol para todos”?. Porque vimos, en una, a TyC Sports. ¿O nos equivocamos?.

Ya en partido, dos sensaciones para alentar una tarde distinta. Maggiolo primero (con gran ayuda de Ibáñez) y Bareiro después. Venía para goleada. Eso pensamos… y así aguardamos la pausa de vestuarios.

Pero, ¡que distinto el complemento!. Como dijo uno, el aurinegro no se despertó de la corta siesta y vino uno; después; y también el tercero. 2-3 abajo y a sufrir, desesperadamente. Por esas cosas que precisamente tiene el fútbol. Con el “misterio” del entretiempo; lo que dicen los técnicos allí; y cómo se dan las situaciones cuando se vuelve del descanso. Para Olimpo, peor, imposible.

Hubo que soportar el marcador adverso, dado vuelta sólo en un cuarto de hora por el Tomba mendocino, hasta el momento final del partido, ya en tiempo de alargue. Allí apareció el paraguayo Néstor Bareiro, no tantas luces pero sí mucho empuje y todas las ganas, para meter adentro el empate que, a esa altura, supo casi a victoria, porque enfrente estuvo un equipo que por algo tiene un lugar en la Copa Libertadores y por algo también le hizo 4 al mismísimo Boca del amargo Falcioni.

Entonces, es cierto que se perdieron dos puntos de oro. Pero se rescató uno, que también vale mucho. Es válido, y no puede dejar de tenerse en cuenta, que algo pasó (desconcentración; superioridad mal entendida; exceso de confianza; y vaya a saber cuántas circunstancias más) que trastocaron en sufrimiento lo que era para goleada.

¿Fueron los cambios, que esta vez no sirvieron?. Acaso, ¿se justificaba que Federico Domínguez y Ezequiel Maggiolo dejaran el campo?. Algo que obliga a pensar al cuerpo técnico de cara a Racing, el próximo sábado (5), en el “Presidente Perón” de Avellaneda.

La vuelta, tras una más rápida apertura de las puertas esta vez, fue con un sabor si se quiere agridulce. Pudo ser fiesta; fue apenas consuelo. Pero Olimpo, a despecho de los relatores y comentaristas capitalinos, del medio que sean, a quienes no les gusta que el aurinegro sea puntero e invicto, está ahí arriba y sigue afuera del descenso directo, con 7 puntos sobre 9 posibles y 1,136 de promedio. Y que digan lo que quieran los demás…

LA SÍNTESIS

Olimpo (3): Laureano Tombolini; Eduardo Casais, Marcelo Moset, Nicolás Bianchi Arce y Federico Domínguez (36 minutos, Juan Pablo Schefer); Marcelo Ricci (67 minutos, Carlos Salom), Juan Manuel Cobo, David Vega y Martín Rolle; Néstor Bareiro y Ezequiel Maggio (59 minutos, Julio Furch). Suplentes: Matías Ibáñez, Diego Reynoso, Pablo Jerez y Roberto Brum. Director técnico: Omar De Felippe.

Godoy Cruz (3): Nelson Ibáñez; Emanuel Aguilera, Leonardo Sigali y Emir Faccioli; Lucas Ceballos, Israel Damonte, Ariel Rojas (90 minutos, Juan Carlos Falcón), Adrián Torres (40 minutos, Álvaro Navarro Bica) y Mariano Donda; Rodrigo Salinas (81 minutos, Sergio Sánchez) y Fabricio Núñez. Suplentes: Sebastián Torrico, Francisco Dutari, Sebastián Olivares, Gabriel Moyano y Pablo Miranda. Director técnico: Jorge Da Silva.

Los goles: en el primer tiempo, a los 16 min utos, Ezequiel Maggiolo (Olkimpo); y a los 33 minutos, Nésdtor Bareiro (Olimpo); y en el segundo tiempo, a los 6 minutos, Alvaro Navarro (Godoy Cruz); a los 10 y 21 minutos, Fabricio Núñez (Godoy Cruz); y a los 48 minutos, Néstor Bareiro (Olimpo).

Amonestados: Juan Pablo Schefer, de Olimpo; y Lucas Ceballos, de Godoy Cruz.

Expulsado: Leonardo Sigali, de Godoy Cruz.

Arbitro: Jorge Baliño.

Terceras: Olimpo 3, Godoy Cruz 1.

Estadio: Roberto Carminatti.

FOTO

Néstor Bareiro: dos goles, para que Olimpo sume y siga.