DE POTRERO, PERO MAL

Sábado de feriado largo en octubre. Pero feo, sin dudas, después del aguacero de la madrugada. Que no alcanzó para limpiar el cielo y dar paso a un sol de primavera, de esos que se disfrutan.
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Sobre mediodía, para ver “qué pasaba” dimos una vuelta por la primera cuadra de calle Sarmiento Algunos se iban ya, pero la cosa recién empezaba, por la espera reglamentaria. Porque no había quórum en Olimpo para la asamblea y los que estaban tuvieron que esperar.
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Adentro, unos 200 (¿o algo más?) asistentes. Y un desorden de aquellos, porque algunos ni siquiera entendían qué estaban haciendo. Vimos, sólo como observando, a Roberto Migliorini. Cuando él era el presidente aurinegro, colaboramos en ocasión de la recordada liguilla Pre Libertadores. ¡Qué tiempos aquellos y qué distantes parecen ahora!.
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Supimos, después, que el 15 de noviembre habrá elecciones. ¿Entre quiénes?, sería bueno saber, porque ¡se han complicado tanto las cosas que tienen que ser simples!.
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Sobre la tarde, escuchamos que la primera local del olimpiense ganó ¡11 a 3! A Sansinena. Y que Mondelo hizo 6 goles. Bella Vista, Liniers, Tiro Federal y Olimpo pugnarán ahora en el cuadrangular por el título.
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Después, Argentina tuvo una ráfaga y se puso 2 a 0 ante Uruguay. Pero del descuento oriental hacia delante fue otra cosa. Partido de potrero, pero mal. De esos de “riña callejera”, entre “patadas” y protestas. ¡Qué lástima!. Y Román (sí, Riquelme), quejándose siempre. ¡Llorón!, por naturaleza. ¿Con qué necesidad?. Y Basile protestando, también. Y más patadas, de un lado (el uruguayo), un poco más; pero sin que los “azules” se quedaran atrás. Fue triunfo, pero ahí, nada más. Ahora, el viaje a Chile.
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La buena, cuando empezaba el feriado: el triunfo de Bahía Blanca Estudiantes, ante boca. El albo lleva 3/3. El Nacional Monte Hermoso 0/3. ¿Cómo seguirá?. Ojalá repunte el celeste y los del Casanova mantengan su buena racha. Buen domingo para todos, incluidos los artesanos, a los que les llovió todo.

FOTO

Agüero y Messi, los anotadores argentinos ante Uruguay. Después, sólo barullo.