ESPAÑA, GRACIAS A VILLA, SUPERÓ EL MALEFICIO DE CUARTOS

JOHANNESBURGO (AFP).- España se clasificó a semifinales del Mundial de Sudáfrica-2010 al ganar a Paraguay por 1-0, este sábado (3), en Johannesburgo, gracias a un gol de David Villa a siete minutos del final, superando el maleficio de los cuartos de final que le perseguía históricamente.

Cuando el partido iba directo hacia la prolongación, Andrés Iniesta armó un ataque, cedió el balón a Pedro, que venía por su derecha, quien remató a un poste, el rebote llegó a Villa, que marcó, no sin antes tocar la pelota en los dos palos (83).

Con este triunfo, España, actual campeón de Europa, tiene asegurado igualar su mejor puesto en la historia de los Mundiales, la cuarta plaza que logró en Brasil 1950.

El delantero asturiano, auténtico salvador de España en este mundial, y que ya había marcado el tanto de la victoria ante Portugal en octavos, lleva cinco dianas y se coloca como máximo goleador del torneo.

España se medirá en semifinales, el miércoles (7) en Durban, a Alemania, que goleó 4-0 a Argentina y ante quien disputará la revancha de la final de la Eurocopa'2008, que ganó la Roja en Viena.

Paraguay pudo en dos ocasiones haberse adelantado en el marcador, tras un gol anulado injustamente a Nelson Haedo Valdez en el minuto 41, y con un penal lanzado por Óscar Cardozo en el 58, que fue detenido por Iker Casillas.

España, que se podía haber puesto con un 1-0 en contra con el penal de Cardozo, pudo a su vez ponerse en ventaja tres minutos después, en el 61, con una pena máxima a su favor, que ejecutó Xabi Alonso y paró Justo Villar.

En un primer intento, Xabi Alonso había marcado el penal, pero el colegiado guatemalteco Carlos Batres lo mandó repetir y el portero guaraní adivinó la dirección del balón.

Paraguay controló el juego en la primera mitad, con dos líneas de cuatro delante de su portero, que hicieron imposibles las entradas españolas, pero en la segunda mitad, el combinado guaraní, que había jugado además una prolongación en octavos contra Japón, pagó el esfuerzo.

La Albirroja fue la primera en disparar a puerta con un tiro raso de Jonathan Santana en el minuto 1, que atajó Iker Casillas, y volvió a llevar peligro en el minuto 10 con un cabezado de Christian Riveros que se fue alto.

España, que repitió el mismo equipo que ganó a Portugal, con dos centrocampistas de contención, Sergio Busquets y Xabi Alonso, no encontraba la manera de llegar a puerta.

Los guaraníes se habían disfrazado de Suiza y esperaban cualquier error español para sorprender a su rival en el contragolpe, como hicieron los helvéticos cuando ganaron a los españoles 1-0 en el primer partido de la Roja en este Mundial.

Hubo que esperar hasta el minuto 29 para que España disparara por primera vez a puerta, con un intento de Xavi Hernández que se marchó alto.

Paraguay hacía valer su jerarquía defensiva, tras haber llegado a cuartos de final habiendo encajado sólo un gol en cuatro partidos.

Los guaraníes pudieron irse con ventaja al descanso ya que Nelson Haedo Valdez marcó un gol válido en el minuto 41, al recibir un centro desde la derecha de Edgar Barreto, parar el balón y batir a Casillas, pero el árbitro guatemalteco Carlos Batres decretó fuera de juego.

Paraguay apareció más cansado en el segundo tiempo, sin la misma frescura en la presión y en los marcajes.

Pero España seguía sin encontrar muchos huecos y el técnico español, Vicente del Bosque, decidió sacar del terreno de juego a Torres, ya que no encontraba espacios en la férrea defensa paraguaya y dio entrada Cesc Fábregas en el minuto 56.

Dos minutos más tarde, Paraguay se pudo adelantar con un penal por un agarrón de Gerard Piqué a Oscar Cardozo que el propio delantero paraguayo ejecutó, pero detuvo Casillas.

Poco después (61), Antolín Alcaraz empujó a David Villa cuando se escapaba y Batres decretó un nuevo penal, que marcó Xabi Alonso, pero el colegiado guatemalteco lo mandó repetir, y esta vez Justo Villa le adivinó la intención al centrocampista del Real Madrid.

Con el 1-0, Paraguay, que deja el mundial habiendo logrado la mejor clasificación de su historia, los cuartos de final, pudo empatar en el 88, pero un Casillas inmenso tapó el disparo de Roque Santa Cruz y España sueña ya con la gloria.