OLIMPO ARRANCARÁ PARA DAR PELEA, COMO SIEMPRE
Debuta otra vez en Primera A, ante Banfield. Con los males de arrastre. Pero también con todo su empuje.
No puede sorprendernos cómo llega Olimpo a su soñado retorno a la Primera A de la Asociación del Fútbol Argentino. Eso sí, y de antemano, hubiera sido deseable que la instancia previa, favorecida por el largo período que esta vez provocó la disputa del Mundial Sudáfrica 2010, se hubiera manejado mejor.
Otra vez -y van… unas cuantas- la dirigencia (entiéndase por ella el “mandamás” o como quiera llamársele) volvió a hacer gala de sus caprichos; de sus actitudes inconsultas; y del ¡hago lo que se me canta y qué!, que no es nuevo.
Además, y aunque los “perioledistas” que nunca faltan traten de minimizar la cosa (desde todo tipo de argumentos poco creíbles, ¡siempre!), nuevamente se puso de manifiesto que todo pasa por una sola mano; y que si Jorge Ledo (¡ojo!, el único en condiciones de “liderar” procesos así) no está (se lo ubica afectado por algún problema de salud) no hay, por Sarmiento 52, nadie que mueva absolutamente nada. Porque no lo tiene permitido (¡faltaría menos!) y porque no sabría cómo hacerlo, tal es la total y absoluta “ledo-dependencia” que afecta a un club que está por llegar a los 100 años.
Lejos está, por supuesto, más allá de sus logros deportivos (que nadie puede desconocer y que nosotros hemos seguido como hinchas, como socios, e incluso como periodistas por largo tiempo, hasta que se nos prohibió hacerlo en esta última condición, hace algunas temporadas ya), el aurinegro, de parecerse, al menos en cierta porción, a la entidad señera de otros tiempos. Ahora es fútbol profesional (alternando buenas y malas) y sólo mantiene su vigencia porque entre la Primera A y el Nacional B, viene codeándose con los mejores “40” del país, desde el 2001, para tomar como punto de referencia aquel ascenso del 27 de diciembre y sus incursiones en la divisional de elite y en el ascenso, desde entonces.
Nadie niega (y bonito sería que alguno lo intentara, si no sabe de qué se trata) que Olimpo es, por lejos, el más jerarquizado exponente futbolístico de aquí al extremo sur de la Argentina, pero también hacia arriba, de toda la provincia de Buenos Aires, excepción hecha de aquellos clubes que están en AFA desde siempre, históricamente, como que pertenecen al gran conglomerado que rodea a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. De los “provincianos” bonaerenses y hacia abajo, ¡nadie, ha habido, como el oro y negro!.
También es cierto –y no lo vamos a negar nosotros, que venimos diciéndolo desde siempre– que a Olimpo pareció que “siempre le faltaron 5 para el peso”, a la hora de reforzarse muy bien en tiempo y forma. Los que siempre encuentran pretextos válidos, y a quienes definimos como los “perioledistas”, batieron el parche con aquello de que “no hay jugadores en plaza”. ¿Qué no los hay?. Por qué, entonces, los encuentran los demás, sería la cuestión. ¿Siempre se los roban?. O quizás, ¿nunca se arriesga lo debido?.
Lo cierto es que otra vez se sumaron jugadores, sobre la marcha; e incluso está hablándose, por estas horas, que llegarían algunos más. Pero tan tarde que para cuando estén en condiciones de jugar ya habrán pasado varias fechas; o lo harán faltos de estado físico o “de fútbol”, por arribar a destiempo.
El domingo (8), a las 11.10, debutará Olimpo en la Primera A, temporada 2010/2011. Jugará ante Banfield, en el estadio “Florencio Sola”, del Taladro. Empezará a transitar un largo camino. Con las precariedades de siempre. Con las ilusiones de todos los tiempos. Y su gran legión siguiéndolo, algo que está totalmente fuera de discusión.
No puede sorprendernos cómo llega Olimpo a su soñado retorno a la Primera A de la Asociación del Fútbol Argentino. Eso sí, y de antemano, hubiera sido deseable que la instancia previa, favorecida por el largo período que esta vez provocó la disputa del Mundial Sudáfrica 2010, se hubiera manejado mejor.
Otra vez -y van… unas cuantas- la dirigencia (entiéndase por ella el “mandamás” o como quiera llamársele) volvió a hacer gala de sus caprichos; de sus actitudes inconsultas; y del ¡hago lo que se me canta y qué!, que no es nuevo.
Además, y aunque los “perioledistas” que nunca faltan traten de minimizar la cosa (desde todo tipo de argumentos poco creíbles, ¡siempre!), nuevamente se puso de manifiesto que todo pasa por una sola mano; y que si Jorge Ledo (¡ojo!, el único en condiciones de “liderar” procesos así) no está (se lo ubica afectado por algún problema de salud) no hay, por Sarmiento 52, nadie que mueva absolutamente nada. Porque no lo tiene permitido (¡faltaría menos!) y porque no sabría cómo hacerlo, tal es la total y absoluta “ledo-dependencia” que afecta a un club que está por llegar a los 100 años.
Lejos está, por supuesto, más allá de sus logros deportivos (que nadie puede desconocer y que nosotros hemos seguido como hinchas, como socios, e incluso como periodistas por largo tiempo, hasta que se nos prohibió hacerlo en esta última condición, hace algunas temporadas ya), el aurinegro, de parecerse, al menos en cierta porción, a la entidad señera de otros tiempos. Ahora es fútbol profesional (alternando buenas y malas) y sólo mantiene su vigencia porque entre la Primera A y el Nacional B, viene codeándose con los mejores “40” del país, desde el 2001, para tomar como punto de referencia aquel ascenso del 27 de diciembre y sus incursiones en la divisional de elite y en el ascenso, desde entonces.
Nadie niega (y bonito sería que alguno lo intentara, si no sabe de qué se trata) que Olimpo es, por lejos, el más jerarquizado exponente futbolístico de aquí al extremo sur de la Argentina, pero también hacia arriba, de toda la provincia de Buenos Aires, excepción hecha de aquellos clubes que están en AFA desde siempre, históricamente, como que pertenecen al gran conglomerado que rodea a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. De los “provincianos” bonaerenses y hacia abajo, ¡nadie, ha habido, como el oro y negro!.
También es cierto –y no lo vamos a negar nosotros, que venimos diciéndolo desde siempre– que a Olimpo pareció que “siempre le faltaron 5 para el peso”, a la hora de reforzarse muy bien en tiempo y forma. Los que siempre encuentran pretextos válidos, y a quienes definimos como los “perioledistas”, batieron el parche con aquello de que “no hay jugadores en plaza”. ¿Qué no los hay?. Por qué, entonces, los encuentran los demás, sería la cuestión. ¿Siempre se los roban?. O quizás, ¿nunca se arriesga lo debido?.
Lo cierto es que otra vez se sumaron jugadores, sobre la marcha; e incluso está hablándose, por estas horas, que llegarían algunos más. Pero tan tarde que para cuando estén en condiciones de jugar ya habrán pasado varias fechas; o lo harán faltos de estado físico o “de fútbol”, por arribar a destiempo.
El domingo (8), a las 11.10, debutará Olimpo en la Primera A, temporada 2010/2011. Jugará ante Banfield, en el estadio “Florencio Sola”, del Taladro. Empezará a transitar un largo camino. Con las precariedades de siempre. Con las ilusiones de todos los tiempos. Y su gran legión siguiéndolo, algo que está totalmente fuera de discusión.
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